Pues aquí estoy otra vez.
Hoy os voy a contar algo que me ocurrió la pasada semana. Escribo esto hoy porque mañana tengo otro partido de baloncesto, y quiero que se me dé igual de bien que el fin de semana pasado.
Lo que ocurrió el domingo pasado fue algo impresionante, alucinante, que después de una semana sigo sin creérmelo de verdad.
Bueno pues lo que paso fue que complete el mejor partido de mi vida (hasta la fecha). Al final acabe con 31 puntos (4 de 6 en tiros de 3), 10 rebotes, 5 asistencias y dos tapones. Para mí, eso es un logro impresionante, algo que no se si podre repetir algún día. Yo por mi parte voy a intentar mejorar día a día, coger confianza en mí mismo y hacer lo que mejor se me da, pasármelo bien jugando al baloncesto.
Ahora vamos con el partido, porque no es lo mismo meter 31 puntos cuando tu equipo va ganando contra un equipo que es "malo", que meter 31 puntos cuando tu equipo va perdiendo de 20, para remontar y acabar ganando sabiendo que has dado lo mejor de ti.
El partido en general estuvo entretenido. Yo pensaba que el entrenador me iba a poner en el quinteto inicial pero al parecer no fue así, asique me cabreé un poco, pero no dije nada. Cuando el entrenador me llamo para entrar al partido, yo me alegre, y pensé "Voy a dejarme la piel en el campo para enseñarle al entrenador lo que valgo y lo que soy capaz de hacer." y al acabar el partido el entrenador me dio tantas veces la enhorabuena que acabo por molestar un poco.
De mi equipo no fui el único inspirado aquella tarde, un compañero, Alex, acabo el partido con 23 puntos, 21 de ellos en el último cuarto. Un máquina.
Algo que llama mucho la atención de este partido, es la puntuación del último cuarto, que son más puntos que en el resto del partido.
6. UBC - 8 - 14 - 17 - 42 un total de 81
4. Kinderhaus - 17 - 14 - 22 - 20 un total de 73
Bueno pues como he dicho antes, el parcial del último cuarto ¡¡salta a la vista!!
Pues eso es lo que fue del partido de mi vida.
Un saludo desde Alemania y a ver qué pasa este fin de semana.
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2 comentarios:
Enhorabuena tío, eso son números de crack! A ver que tal el partido de hoy, seguro que el entrenador se lo piensa dos veces antes de dejarte en el banquillo.
Un abrazo
No te obsesiones con los números, hazlo con el juego en sí. La manera de jugar a basket es el fiel reflejo de cómo es uno.
De todas formas, partidazo, claro que sí. Y encima remontando, que te deja una sensación el doble de placentera.
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